Los cambios que experimenta el cuerpo femenino durante el embarazo son bastante evidentes y varían en función de los meses que se lleve en gestación. En este caso, queremos referirnos al dolor de espalda, un síntoma que aparece con mayor fuerza a partir del tercer trimestre, especialmente en la denominada zona lumbar.

 

Esta situación se debe mayoritariamente a dos factores. La primera tiene relación con la hipermovilidad que se produce en las articulaciones, provocada por la hormona relaxina y que tiene directa incidencia en cómo se acomoda el feto al interior del cuerpo de la mujer. En otras palabras, es la preparación natural que el organismo tiene de cara al parto.

 

En segundo lugar nos encontramos con la postura que se adopta con el paso de los meses. Esto tiene estrecha relación con el crecimiento del útero y el peso que se posa en dicho lugar, provocando una curvatura bastante marcada en la espalda.

 

Si estás pasando por esta etapa del embarazo o vas a entrar a ella en los próximos meses, en este artículo te dejaremos algunos consejos que de seguro te ayudarán a disminuir los síntomas y llevar una gestación mucho más saludable.

 

Dormir de costado

 

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Nuestra primera recomendación es que durante tu descanso nocturno te poses sobre la cama en posición lateral. Esto ayudará a tu espalda corrija la posición y, por sobre todo, descanse de buena manera durante las noches.

 

También sería ideal que doblases ligeramente las rodillas durante el descanso y en caso de que sea posible poner una almohada entre ellas.

 

Relajación

 

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Es importante que sepas manejar los dolores y tomar consciencia sobre los cambios que vive tu cuerpo. Es por esta razón que practicar técnicas de relajación y meditación puede ser una excelente forma de reducir los síntomas y preparar a tu cuerpo de la mejor manera posible para el parto.

 

Higiene postural

 

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Sabemos que es muy complicado seguir las normas de higiene postural en tu condición, pero es un esfuerzo que vale la pena llevar a cabo. Lo ideal es mantener una correcta postura tanto cuando estás de pie como cuando te sientas o te vas a la cama. Esto evitará que los malos hábitos se perpetúen más allá de la gestación.

 

Si necesitas mayores consejos sobre las molestias físicas que trae consigo el embarazo, no dudes en ponerte en contacto con nuestros especialistas y resolver cualquier duda que puedas tener. – Fisioterapia Pamplona